Dos amigos que se conocen desde la más tierna infancia. Marta y yo fuimos al mismo colegio hasta COU. Nuestros caminos tomaron direcciones diferentes, yo me dediqué a las terapias manuales y psicosomáticas sin dejar de lado mi vena creativa (música y escritura), y Marta viajó y viajó por todo el mundo con su carrera de económicas a cuestas y queriendo dedicarse a su gran pasión, la ilustración. Fue años después cuando nos encontramos y decidimos juntar aquello que nos gusta crear, comenzando por este tierno cuento para los más pequeños.