Infancia sin patria en una guerra mundial

Sobre el libro

La guerra de Siria ha generado más de cuatro millones de refugiados registrados por ACNUR y la mayoría son menores de edad. Europa responde al instinto de huida de la guerra ignorando los principios de solidaridad y humanidad que la fundaron tras la Segunda Guerra Mundial, dando la espalda a la actuación de la ayuda humanitaria y convirtiendo el futuro de la infancia en estrategia política. Sólo interpretando y entendiendo la guerra se le podrá poner fin e iniciar la reconstrucción de una patria robada a millones de niños y niñas.

Sobre el autor

David del Campo es director de Cooperación Internacional y Acción Humanitaria de Save the Children. Desde 1998 está vinculado a la cooperación internacional tanto del lado institucional como de las organizaciones españolas e internacionales. Sus labores de acción humanitaria lo han llevado a zonas de catástrofe como las afectadas por el huracán Mitch o el tsunami del sudeste asiático, así como por áreas conflictivas como Sudán, Gaza o Siria.

Por qué apoyar el libro

Este libro es una guía para comprender cómo y por qué empezó el conflicto de Siria, de qué manera se ha ido desarrollando, qué consecuencias ha tenido y en qué momento se encuentra. 

David del Campo, por su experiencia en Save the Children, pone el foco en el papel protagonista que juegan los niños, los más perjudicados y grandes olvidados del conflicto sirio.

Tras cuatro años observando y trabajando sobre la guerra de Siria, David comparte sus reflexiones y análisis sobre este conflicto y sus consecuencias.

El experto en cooperación internacional hace una denuncia de la absoluta indefensión de la población civil y, sobre todo, de los niños en el conflicto de Siria, así como del desinterés de la comunidad internacional.

El primer título de la colección Galileo de la editorial, dirigida por Eduardo Madina, aborda con rigor y de manera precisa el asunto más complejo de la actualidad internacional.

Todos los beneficios del libro que reciba el autor serán destinados a proyectos humanitarios de Save the Children y Médicos sin Fronteras en las ciudades sitiadas dentro de Siria.

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