«Invisible»

Y ahí estaba él, lo vi tumbado en la camilla del hospital. Me quede de piedra, ya no era invisible, todos lo veíamos, sus padres, sus maestros y hasta su agresor. Su padre estaba ahí, mirándolo.
- Ojalá hubiese pasado más tiempo con él, ojalá me hubiese contado por el infierno que está pasando- decía con lágrimas en los ojos.
- Señor, nunca es tarde para arrepentirse- le dije yo tocándole la espalda- es difícil pasar por una situación así, uno nunca sabe cómo reaccionar. Y no estoy justificando lo que hizo ni mucho menos, si no que nunca aprendió a gestionar bien sus emociones, fue eso lo que le llevo hasta tal extremo.
-Si, y yo lo entiendo, pero ¿qué ganaba con suicidarse? ¿Llamar nuestra atención?
- Una persona con mente suicida, no elige ser así, no importa ni la edad que tenga, ni la clase social y muchísimo menos el género. Lo que le paso a su hijo, fue una brutalidad, sin duda. Pero ten en cuenta que usted se pasaba el mayor tiempo trabajando y por eso no se dio cuenta de lo que le paso a su hijo. No le estoy echando a usted la culpa, si no estoy describiendo la situación.
-Yo de que no fui el mejor padre para él, pero primero de ahora en adelante estar para él- decía el padre muy arrepentido.
-Quizás ahora sea demasiado tarde…




(Es inspirado en el libro de invisible de Eloy Moreno)