«Retratos»

Las fotografías quedaron espectaculares, no en vano una de ellas fue portada de varias de las revistas más prestigiosas del momento. En blanco y negro mostraban a Gisli en el escenario. En la primera fotografía su pelo largo tapaba su cara y parte del micrófono mientras su cuerpo estaba contraído sobre su mismo, parcialmente inclinado hacia delante y apoyado en sus delgadas piernas, como si suplicase.
En la segunda foto estaba apoyado en los teclados con ambas manos y con la cabeza movida, mientras el resto del escenario permanece intacto. Cuando capté la imagen movía la cabeza a uno y otro lado.
La tercera fotografía es un retrato, primer plano, perfil con zoom. Su pelo hacia atrás, mostrando su rostro. Su boca perfecta abierta, su nariz egipcia rotunda y su frente inmaculada. Pero lo que en realidad llama la atención de esta última fotografía son unas gotas de agua. Las gotas de agua que escapan de su ojo cerrado y que recorren su sien, podría haberse disimulado con el sudor, pero su recorrido es perfectamente reconocible.
Las lágrimas que ponían punto y final a nuestro amor.