«Un legado incalculable»

Afganistán. 2021. ¿No cuesta mucho ponerse en situación, verdad?
Todas las tropas extranjeras abandonan Kabul, llevándose, aparentemente, a todos los colaboradores afganos. Pero la realidad es otra. En Afganistán permanecen familias y familias que no pueden salir del país debido a la falta de medios para poder acceder al aeropuerto.

“Yo, representante de Cruz Roja en el país asiático, me quedo a medio camino entre el gobierno talibán y la anterior dirigencia. Los nuevos mandatarios, a punta de AK-47 me ordenan unirme a ellos para ayudarles en exclusiva. Yo me niego.

Tampoco voy a marcharme del país, pero decido enfrentarme a las autoridades y mantengo mi clínica abierta. Ahí fuera hay gente que sigue necesitando prótesis para sus brazos y piernas amputados por las minas antipersonas. Voy a seguir a su lado. Desconozco si las amenazas de los talibanes se cumplirán, pero yo no puedo fallar a mi ética ni a mis colaboradores, que no se han marchado. Ayudaremos al que lo necesite. Hasta el final”.

Y este fue el WhatsApp de tu abuelo solo 3 días antes de que fuera asesinado en la entrada de la clínica por un antiguo paciente que se unió a los talibanes. Nunca olvides la enseñanza que nos dejó, hijo. Pudo haber salido del país, las Fuerzas Armadas de EEUU fueron a buscarle para traerle de vuelta. Pero él se negó para quedarse en un país al que le ofreció todo y que se lo devolvió quitándole la vida. Y nunca lo olvides, un país es lo que es por su gente, no por sus gobernantes. Tu abuelo dio la vida por ayudar a esa gente y ahora estoy muy orgullosa de que tú sigas sus pasos. Buen viaje, hijo, sé feliz en Afganistán y haz feliz a la gente.