La gira acaba de comenzar y Antoine está cansado, fotógrafo de profesión, es el retratista oficial de la gira del rapero francés Dubois y su pareja en la intimidad, ambas ocupaciones empiezan a ser insostenibles y Antoine no aguanta más esa presión dando un ultimátum al rapero.
-O nuestra relación se formaliza y sales del armario o desaparezco.
-Yo también a ti! ¡Pero no aguanto más vivir así, me voy, no me busques que estaré muy lejos!
El rapero está fatigado y deprimido, perdiendo su voz por el estrés, exhausto y fracasado pone fin a su gira europea, retirándose a su mansión de Mónaco, dándose a la bebida, sometido a un abandono extremo.
Pasados dos años y recuperado de su adicción, vuelve a los escenarios, pero nada es igual, ningún promotor le avala; cuando cree que todo está perdido recibe la llamada de un conocido agente neoyorquino sacándole de su ostracismo.
Dubois coge un vuelo a Nueva York y firma una gira de varios conciertos por tierras norteamericanas, recuperando su estima y su caché, pero le falta lo más importante... Antoine.
El rapero se encuentra inmerso en su gira, hoy ha cantado en Oregón, ha sido un éxito, cansado se retira a descansar, ahora lleva una vida ordenada sin excesos.
-¡Dubois, soy François!, había una nota en recepción, ¡Abre!
-¡No quiero que me molesten!, llevas muchos años conmigo como agente y sabes como soy con mi intimidad.
-No te molestaría si no supiera que es importante, la forma de proceder me suena mucho.
-Hola, te espero en el hall mañana a las diez, siempre tuyo Antoine