Scrooge abrió la puerta de su casa y entró en el recibidor, cerrando la puerta tras él. La oscuridad y el frío lo envolvieron de inmediato. Suspiró y se quitó la capa, colgándola en un gancho junto a la puerta.
De repente, un sonido llamó su atención. Escuchó un maullido proveniente de una caja que había sido dejada en el suelo, se acercó para investigar y descubrió a un pequeño gatito negro que estaba acurrucado allí dentro.
Scrooge nunca había sido amante de los animales y estaba a punto de abandonar al gato, pero se percató que el felino llevaba una pequeña nota atada al cuello. Con curiosidad, la leyó.
"Por favor cuida de mi pequeño gatito mientras estoy fuera. No tengo a nadie más a quien acudir."
Scrooge sintió una punzada de compasión por la persona que había dejado al gato y decidió cuidar de él hasta que su dueño regresara.
Encendió la luz y llevó al gato a su apartamento en la planta superior, donde lo instaló en una caja con una manta.
Mientras se preparaba para dormir, pensó en la nota y en el dueño del gato. Se preguntó, cómo podía ayudar a esa persona. Decidió buscar al dueño del animal y ofrecerle su ayuda.
Esa noche, Scrooge no tuvo pesadillas y soñó con un futuro en el que la compasión y la empatía eran las principales virtudes de la humanidad.
Enhorabuena compañero!
Saludos Insurgentes