«Cybermatrimonio»

—¡Buenas tardes!, Estamos aquí con Sheila y José, como no podía ser de otra manera, a través de una videollamada. Ella desde Madrid. Él desde un pueblo de Aragón.Desde la entrada en vigor de el cybermatrimonio, más de cinco mil parejas han optado por este modelo de unión en España.Sheila y José son una de ellas.Como verán en sus pantallas, ambos usan filtros para transformar su rostro para permanecer en el anonimato, y, según sus palabras, "por timidez".Cuéntame un poco José, ¿Cómo os conocisteis?
—Los dos éramos muy activos en un grupo de Facebook de hikikomoris y vimos que además de tener eso en común compartíamos muchas aficiones y...
—Disculpa José, para aclarar a la audiencia.¿Qué son y por qué os consideráis hikikomori?
—La cultura hikikomori es una opción... es una forma de vida que elegimos y que implica vivir solo y sin salir de casa.
—Como me has comentado antes fuera de emisión, trabajáis desde casa, pedís la comida a domicilio, evitáis todo contacto social salvo por internet, que por ahí sí que os relacionáis.
—Correcto, así es.
—¿Cuántos asistentes acudieron a vuestra cyberboda?
—Pues unos 150, mandamos un detalle por correo a todos... nos vestimos para la ocasión al estilo Naruto... la verdad es que fue muy emotiva.
—¡Caray!, esos son muchos invitados...¿Eran todos hikikomori?
—No, no todos. Nuestras familias también asistieron.
—Y salvo el contacto físico que obviamente es imposible.¿Qué diferencia creéis que hay de convivir a estar cybercasados?

—Imagino que se parece mucho a un matrimonio de convivientes, tenemos alguna pelea, hay temporadas...no sé, salvo que por ejemplo no nos peleamos por quién limpia la casa y esas cosas...
—Ha sido un placer, mis mejores deseos para este cybermatrimonio.Devuelvo conexión a plató.Marta Gómez. Madrid. BBC Mundo.