«Dame toda tu leche»

- ¿Joder! ¡Unos minutos más y no llego a entrar al edificio! – exclamó agitado Rubén secando su sudor y poniendo su camisa dentro del pantalón como quien quiere recomponerse.

- Te lo advertí Rubén, pero como casi siempre no me hiciste caso. – le replicó Jaime terminando de aliñar la ensalada y viendo por la ventana a la gente agolpada en el portal del edificio donde vivían – En cuanto escuché que ibas a ponerla en el aire en el Descubrimiento de la semana sabía que algo así pasaría. - ¿Ahora que va a pasar? ¿Has podido hablar con Sandra? Te ha llamado varias veces.

- ¡Pero como crees que voy a responder si no podía ni salir del coche siquiera! – bramó indignado – y a Sandra, ¡que le den! ¡Menuda capulla!

- Anda deja de quejarte y dúchate que estás hecho un gorrino, cari. – Jaime le sugiere dándole una palmadita en el culo. – Luego ven a la mesa que tengo una buena noticia.

Tras un rato Rubén sale secándose la cabeza y ve todo dispuesto para cenar y a Jaime viendo el móvil sonriendo - ¿Qué te hace gracia, ahora? – le dice Rubén mientras se sienta en la mesa.

Jaime sin levantar la mirada le responde casi sin poder contener ya la risa – Aquí mirando el Twitter como la has liado pollito! ¡Al menos eres ‘trendic topic’!

- Bueno, bueno… ¿y la buena noticia? ¿Cuál es?

- Que no todo es malo Rubén. Has llegado a los 10000 seguidores y te han salido defensores.

- No entiendo nada. ¿Desde cuándo la sociedad sataniza una canción acerca de la lactancia materna? ¡Porque básicamente “Dame toda tu leche” es eso pero en reggaetón! ¿Esperan acaso que ponga una ópera prima en la cadena número uno de reggaetón EN-KUATRO?

- Desde siempre, cari. Desde siempre.