La historia vista desde fuera
Estoy considerada dentro del mundo de Las Letras como una critica de prestigio y en varias ocasiones han caído en mis manos algún fragmento o historia de este autor, al que personalmente le tengo un gran aprecio, y la verdad es que me extraña muchísimo que siga con su empeño de darse a conocer a través de la escritura. Me ha remitido o entregado en mano borradores de sus obras los cuales no he sido capaz de leer al completo. El aburrimiento y el sopor que me producen llega a limites insospechados. He tenido la oportunidad de hacérselo saber por mi misma cuando hemos hablado de ello, pero no me atrevo a ser sincera con él. Podría crearle tal frustración que sería realmente dramático para él debido a la confianza que tiene puesta en mi y aunque estoy segura que le haría un bien no me traería cuenta porque se a ciencia cierta que perdería su amistad que tan bien me hace. Me encuentro, o más bien me ha metido, en una tesitura complicada de la que no soy capaz de salir por mi misma. Quizás algún día pueda decirle lo que pienso de su narrativa pero para ello antes debemos de dejar de ser amantes.
La verdad que si escribiera tan bien como hace el amor su obra se convertiría en un "best-seller" pero mucho me temo que esto jamás podrá ser así.
La historia vista desde dentro
Aunque me considero un autor novel creo sinceramente que mis historias contadas desde la subjetividad quedan en el vacío por la vorágine de escritores que han surgido en los últimos tiempos. Y es que tanto el ordenador personal como Google y la Wikipedia están haciendo que cualquier persona sin mucho que decir se ponga a los mandos y sea capaz de narrar algo difícil de digerir.
La gente escribe y escribe, pero yo tengo mucho que decir, y estoy seguro que tarde o temprano encontraré a la persona idónea que me introduzca en este mundo. Estoy cansado de leer historias de algunos afamados autores que dejan bastante que desear. Se han creado un nombre y a dormir y verlas venir, por no decir de aquellos que necesitan de "negros" para hacerles su trabajo.
Estoy seguro de que algún día triunfaré y entonces todos los que se ríen de mi, pero no son capaces de dar la cara, me vendrán a decir: "ya sabía yo que algún día te llegaría el éxito". Entonces será mi momento y podré echarles en cara todo aquello que pienso pero que en realidad no soy capaz de decirles ahora.
Estoy pasando por una etapa difícil, no ceso de mandar mis historias a todo tipo de concursos literarios que se precien, pero nada de nada. Algunos me llaman para decirme que mi obra no es la ganadora pero está entre las elegidas para que sea publicada. Aunque estoy totalmente convencido que me llegara el momento más pronto que tarde y es que mis historias valen y valen mucho. Las Editoriales suelen ser bastante condescendientes con el escritor con el único motivo de que publiques con ellas. Dicen de todo desde: "interesante obra de ficción contemporánea y original propuesta narrativa" hasta: "dominio de la prosa que sin ser vulgar es amable y ágil pero también explicita y dura" con la intención de que caigas en sus garras. Mientras tanto voy desangrándome intelectual y emocionalmente para llegar a una situación en la que se me aclame públicamente.
Sigue así