Bajo una fortaleza repleta de paneles solares dos hombres se agazapan en el búnker. Escuchan unos golpes muy lejanos provenientes del exterior. En el gesto de Goran asoma la preocupación. Aurel está sentado frente al panel de monitores, totalmente petrificado, por la imagen: cientos de personas se agolpan en el gran portón de acceso pidiendo entrar; zombis sedientos de energía eléctrica con sus móviles sin batería en la mano.
—¿Activamos la electrificación del muro?
—Se lo merecen por haberse mofado de nosotros cuando anunciamos la réplica de la máquina de Tesla para la energía libre.
—Son rebaño, Goran. Discúlpalos.
Mientras hablan, Aurel sigue mirando los monitores y se fija en una figura. Parece ser Estela, con un bebé en brazos. La imagen de esa mujer lo transporta a una época lejana. Podía haber sido mi hijo, piensa.
—Tengo que hacer algo.
—¿De qué hablas?
—Ella —responde señalándola—. La conozco.
—No vamos a hacer nada.
—¿Qué sentido tiene quedarnos de brazos cruzados?
—Aunque quisieras salvarla, sería imposible.
Aurel se estira del pelo, derrotado. No había imaginado que experimentaría tanta culpabilidad cuando ambos se jactaban, meses atrás, en los primeros rumores del Gran Apagón. Vuelve a mirar la pantalla y, horrorizado, advierte que hay una avalancha. No queda rastro de la mujer ni del pequeño ser. Aurel se levanta, como animal enjaulado, impotente por no poder hacer nada.
Su compañero mantiene silencio mientras él se sume en un llanto apagado. Le deja unos minutos hasta que se acerca para abrazarlo y hablarle, entre susurros:
—Esto solo servirá si la gente aprende a no depender de la energía.
—Recuérdame cuál es nuestro papel.
—El de siempre. Mantener la conciencia elevada.
—Parece clasista.
—Si te quedas más tranquilo, ve y súmate al resto. Pero no podrás ayudarles mientras tengan necesidad —responde apagando todos los monitores y elevando el volumen de la música hasta el punto de neutralizar el resto de ruidos.
Relato que lleva tu sello José, sin duda.
Saludos Insurgentes
Siento pena por la mujer y el bebé :(