Madre mía, el maldito titular ha dado la vuelta al mundo, hasta en tailandés lo he encontrado. A ver señores, ¿qué le puede interesar a un tailandés que yo me haya caído en un escenario? Pero eso no es lo peor, junto al titular siempre ponen el vídeo. No me atrevo ni a mirar el número de visualizaciones que tiene en YouTube. Solo de pensar que si yo lo hubiera subido, al menos me daría dinero ¿compensaría? Definitivamente no.
Pero vamos a ver, que levante la mano a quién no le haya pasado nada ridículo en la vida. ¿Imposible verdad?, nadie puede y si tú lo has hecho bajala y piensa, siempre hay algo. Vale que yo lo haya llevado a otro nivel. No todo el mundo tropieza en un lateral del escenario y por más que lo intente acaba dando una vergonzosa voltereta y cae como un peso muerto delante de todos los focos. Que la cámara saliera volando y que el pobre cantante tuviera que esquivarla a lo Matrix para que no le sacara un ojo, no me ayudó. Que todo esto pasara en el BBK Life, delante de miles de personas y que todo haya quedado grabado desde todos los ángulos posibles, tampoco.
Me dicen que esto pasará, pero yo lo veo lejano y lo peor es que lo que se sube a la nube en la nube se queda. Decidle adiós a Rubén y dadle la bienvenida a mi nueva identidad, el que se hostió en pleno escenario en el BBK Live y casi le saca un ojo al cantante.
