Todo lo que leas sobre tu madre en los periódicos, lo que digan otros niños, o lo que te cuenten extraños, ignóralo. Tú haz caso a papá y a las tías, ellas mejor que nadie te podrán explicar que hoy tu madre va a morir para salvarte.
Antes de mí han sido muchas otras las mujeres, madres, hijas y hermanas, que dieron su vida por nuestra libertad, por los valores que hoy pretendo mostrarte.
Candela, luz de mis ojos, nunca olvides que tu madre te quiere más que a su propia vida, por eso te pido que me perdones, que no es este un gesto egoísta. Simplemente es una muestra de cuánto se puede querer a alguien, hasta para estar dispuesto a dar la vida para que otras como tú, mi niña Candela, no tengáis que hacerlo por vuestras hijas.
Por favor, nunca te olvides de tu madre.
Te quiero con todo mi corazón.
Vivirás siempre en mi memoria, mi niña.
Tu madre,
Ruth"
Carta de una sufragista a su hija.
Carta y discurso aplicable a situaciones vistas a lo largo del mundo hoy en día.
Ojalá nunca más ninguna mujer muera por defendernos a todas.
Magnífico relato reivindicativo!
Enhorabuena.
Saludos Insurgentes