«Amor volcánico»

En lo más alto de Grecia existía una montaña nombrada ya en los escritos mas antiguos que se conservaban. Tanto los helenos que creían en Zeus o Gea como los actuales habitantes de esas tierras sabían que su cima conectaba directamente con los dioses. Pero todo aquel que intentaba alcanzarla no llegaba muy alto cuando oía el tremendo rugido que de ella salía.

La leyenda decía que todo aquel que escuchara ese sonido estaba siendo avisado por los dioses de que no era la persona elegida para recibir su mensaje. Muchos lo habían intentado, pero todos habían recibido ese "aviso" divino.

A mas de 3400 kilómetros de aquella montaña, en Madrid, había un joven apasionado de la mitología y las leyendas que había escuchado esa historia. Tenía un asunto pendiente desde hacía mas de siete años y, aunque no había escalado nunca, pensó que aquella cima podría darle la respuesta que tanto llevaba esperando. Se equipó con todo lo necesario y se aventuró hacia esa montaña.

Tenía mas de 3000 metros de altura y, apenas escalados los primeros cinco, escuchó ese "aviso" del que tanto se hablaba. Pero, aún contradiciendo a los dioses, él siguió escalando llegando a la cima tras dos semanas de mucho esfuerzo. Como decía la leyenda, los dioses le dieron un mensaje, el que estaba esperando. Nada mas llegar arriba le dijeron que detrás suyo había estado acompañándole durante todo su ascenso la chica que llevaba tantos años sin ver, pero a la que solo pudo observar al llegar a la cima. Ambos se abrazaron y juntos vieron cómo la lava empezó a salir del volcán y los sepultó. ¿Habría sido el castigo de los dioses por no escuchar sus "avisos"?

Al menos ambos pudieron volver a estar juntos una última vez antes de morir.