Miró hacia atrás y vio a dos policías ansiosos por capturarle, miró a su izquierda y vio que se le acercaba corriendo la panadera de la tienda del pueblo a la que le había robado el pan días atrás con un rodillo en sus manos, golpeándolo, como diciendo: ahora es mi turno, verás lo que te espera, miró a su derecha y vio al granjero con un rastrillo de pinchos afilados en la mano con ganas de hacérselas pagar por haberle robado huevos de sus gallinas y alterado a sus vacas para que no dieran leche.
Sin dudarlo, decidió optar por la puerta misteriosa que se encontraba enfrente de él a lo lejos, así que corrió con todas sus fuerzas hacia ella y la cruzó, pero menuda sorpresa se llevaría al ver lo que había tras ella.
Esa puerta le llevó a una realidad totalmente paralela, donde Oliver twist (él mismo) era un chico ejemplar, creo un imperio totalmente legal, seguía siempre las reglas... Se quedó totalmente asustado al ver ese yo de él mismo, ¡No!, ¡Esto no puede ser, es un infierno!, ¿es brujería?, ¡Tengo que salir de este mundo!.
Pero la puerta... Puff, ¡Se esfumó!, Con sus actos el universo creó el castigo idóneo para él, su propio Karma, ¿Que irónico verdad? Un astuto ladrón cayó preso en su propia prisión sin necesidad de estar encerrado entre rejas.
Creía que de todas saldría airoso y sin darse cuenta él sólito escogió su propia condena eterna.
Destino... Karma ... Combinación de ambas..., Ni idea, pero tuvo un final a la altura de quién era, ¿No crees?.
El destino así lo quiso.
Y sí, creo en el destino.
Enhorabuena!
Saludos Insurgentes