«El extraño»

-¡No me lo creo!- estalló Cynthia.

-Calla, que se va a enterar todo el mundo- le rogué. Sentía cómo me subían los colores mientras pensaba que todo el bar nos escuchaba.

-Oye, Elisa, ¿va a tardar mucho en venir tu novio? No quiero que me oiga y se piense cualquier cosa.

-Cuenta, cuenta, no pasa nada- decía Elisa en baja voz- todavía no ha llegado.

Mis amigas estaban expectantes, querían conocer los detalles más suculentos.

Respiré profundamente mientras notaba tremendo calor en mi cuerpo.

-Me metió directamente al probador y empezó a besarme por el cuello apasionadamente. Me dio la vuelta y me empezó a tocar bajo la blusa. Sus cálidas y fuertes manos me apretaban los pechos.-mientras lo contaba me volvía a excitar con el solo recuerdo de su tacto-me subió la falda y empezó a jugar con mis braguitas.

Notaba la chispa en los ojos de mis amigas, eso me ponía más todavía.

-Se agachó-les susurraba- y empezó a comerme ahí mismo.

iiiiii- mis amigas soltaron un gritito.

-Os puedo decir que en los diez años en los que estuve con Jorge nunca me hizo sentir eso. Me subió un delicioso calor por todo el cuerpo y de repente sentí una sensación intensa, unos segundos, cómo si me faltase el aire. Noté su duro miembro dentro de mí. Era tremendo. Embestía con toda su fuerza, como quien en años no había tocado a una mujer.

-Por favor Andrea, no imaginase que hicieras esas cosas. ¿En serio no le conocías de nada?

-¡No sé ni su nombre!-repliqué y se echaron a reír con gran estruendo.

Mientras note cómo se abría la puerta a mis espaldas.

Elisa levantó la mano. 

-Dani, aquí-sonrió indicando nuestra mesa.

Me di la vuelta y contuve la respiración. Era él.