EL PRIMER DÍA DE COLE PARA ADRIÁN
Este año, después de 10 años lejos del pueblo donde crecí, vuelvo tras conseguir una plaza como docente. Recibo de mano de la secretaría la lista de alumnos de 4ºA, el curso que llevaré este año. Como siempre reviso por encima la lista y un hormigueo recorre todo mi cuerpo, al ver que hay dos hermanas con los apellidos de Lucía, la que fuera mi pareja hace una década y que tras la bronca de rigor de nuestros padres, por no tomar medidas, fue a pasar unos días en la ciudad para abortar, mientras sus padres nos prohibieron volver a tener contacto.
Es imposible… debe tratarse de una coincidencia.
EL PRIMER DÍA DE COLE PARA LUCÍA
Como siempre, dejo el coche en doble fila, les deseo a mis pequeñas lo mejor en su primer día de clase, y me dispongo a salir a toda prisa para no llegar tarde al trabajo, y discutir de nuevo con Recursos Humanos para que no me descuenten 5 minutos de la nómina.
Al ver cómo Alicia y Sara van subiendo las escaleras para entrar en clase, veo como alguien muy conocido por mí cruza el paso de peatones en dirección al colegio. Hace diez años que no lo veo, pero mi corazón lo reconoce sin ninguna duda y parece querer salirse del pecho.
Mis labios, temblando, pronuncian: Adrián, mi amor.
EL PRIMER DÍA DE COLE PARA ALICIA Y SARA
Alicia y Sara se cogen de la mano, como hacen desde primer curso, para entrar al colegio. Allí, les esperan sus amigos y los que no lo son tanto.
Pero, por encima de ellos, conocerán a un hombre al que el destino vuelve a poner en sus caminos, y esta vez para quedarse.
Lleno de ternura y amor.
El giro final es brutal, el profesor es papá.
Ds para más el relato.
Saludos Insurgentes