La casa maldita - Cintiacarmonapavon
Cintiacarmonapavon

«La casa maldita»

955 palabras
7 minutos
28 lecturas
Narración de suspense: Un resplandor intermitente en una ventana solitaria, un edificio que sólo cobra vida cuando el reloj marca las doce. ¿Qué secretos esconde este lugar en las horas en que el mundo duerme?

Eran las seis de la mañana cuando sonó el teléfono de la comisaría, hacía una semana que sonaba cada día a la misma hora. 

Los policías que hacían guardia aquella noche se miraron, no querían terminar otra guardia en aquella casa, no querían que la llamada llegara del mismo lugar, no otra vez.

El novato, Lucas, atendió la llamada y palideció de nuevo.

-Esa casa está maldita- dijo mientras se encaminaban a su destino en el coche patrulla.

-No digas tonterías novato. Solo es un bromista al que le gusta llevar cadáveres de animales muertos a una casa abandonada- contestó su superior, Tomás.

-Deberíamos hacer guardia allí- propuso esperando librarse de aquel pesado cargo.

-Estupendo, esta noche vas allí- contestó Tomás haciendo realidad los mayores miedos del novato.

Los primeros días aparecieron pequeños cadáveres de pájaros, ratones o serpientes, después fueron gatos, perros o conejos. Pero aquel novato no estaba preparado para lo que estaba a punto de descubrir. 

En el mismo jardín de siempre había aparecido el cadáver de un caballo con graves signos de violencia. Estaba desmembrado y con muestras de dientes.

<<¿Lo han mordido?¿Quién mordería a un caballo con tanta fuerza como para rasgar su piel?>> se preguntó Lucas a sí mismo.

-Deberías cambiar de ruta Marisa- dijo Tomás bromeando.

-Creo que no volveré a pasar aquí jamás, ni para hacer footing- respondió la chica que, esta vez, tenía el rostro desencajado.

Entonces revivieron la misma declaración de todos los días: Ella había salido a correr, llegó al jardín de la casa, vio el cadáver y llamó a la policía. 

Lucas estaba cansado de esta historia una y otra vez sabía que había algo raro detrás de todo eso, pero Tomás pensaba que solo eran bromas de críos.

<<¿Qué crío sería capaz de matar y descuartizar a un caballo?>> se preguntó Lucas una y otra vez a lo largo del día. Ni siquiera pudo dormir pensando que allí estaba pasando algo inusual.

Aquella noche le tocó hacer guardia, solo y muerto de miedo. Su turno empezó a las diez de la noche, estaba en el coche patrulla delante del jardín mirando, de vez en cuando, a través de la ventana sintiendo que se le paraba el corazón solo de pensar que podría ver un fantasma.

A las doce de la noche un reloj que debía haber en la casa empezó a sonar fuerte haciendo que los vidrios del coche patrulla retumbaran. De pronto unas luces rojas llamaron la atención de Lucas. Provenían de las ventanas de la casa, las cortinas se movían y la luz brillaba iluminando todo el jardín.

El novato quería pedir ayuda pero estaba paralizado por el miedo. Cada segundo que pasaba, cada acto que acontecía, lo hacía estar más nervioso.

El sonido del reloj cesó y la luz se volvió intermitente. 

-1, 2, 3- contó Lucas hasta que la luz se apagó.- 1,2,3- dijo de nuevo, y la luz se volvió a encender.

En el octavo o noveno parpadeo alguien se asomó a una de las ventanas. Lucas no pudo ver claramente quien era, solo pudo ver que vestía una túnica negra y raída.

Cogió el transmisor del coche patrulla y avisó a sus compañeros de lo que estaba viendo. Pidió refuerzos y salió del coche. Apuntó a la ventana con el arma y gritó:

-Salga de la casa inmediatamente o me veré obligado a entrar.

La persona de la ventana se rió, fue una carcajada grave y sonora que retumbó durante minutos en la cabeza de Lucas. Entonces desapareció y la luz, que había sido intermitente todo ese tiempo, se volvió fija.

Lucas se preguntó dónde estarían los focos, deseaba apagarlos de una vez porque esa luz le estaba recordando a la sangre y no le gustaba la sensación que le transmitía.

Aquella figura apareció en la otra ventana, alzó las manos y las pegó al cristal arrastrándolas hacia abajo dejando un rastro de sangre. El novato, pensando que se había cometido otro asesinato se encaminó a la puerta horrorizado y muerto de miedo.

Le dio una fuerte patada a la puerta y la abrió completamente, sin molestarse en cerrarla tras entrar. Con la pistola guiando su camino, subió a la primera planta. Las paredes estaban manchadas, el muchacho no sabía si era su imaginación, su miedo o la luz roja que lo iluminaba todo, pero aquel líquido que chorreaba por las paredes parecía sangre.

La risa de esa persona se repitió pero, esta vez, era aguda e incómoda para los oídos. 

De pronto la figura estaba delante de Lucas, había aparecido de la nada. Tenía el rostro completamente blanco, salvo por el rastro de sangre brillante que había en su boca y  sus ojos eran dos huecos negros que le pusieron los pelos de punta al pobre novato que se había hecho a la idea de que moriría. 

La negra figura se abalanzó sobre el chico, este disparó sin éxito alguno pues las balas parecían atravesar a aquel ser. Gritó sabiendo que no sería escuchado y forcejeó tratando de evitar los puntiagudos dientes que surgieron de esa sangrienta boca. Pero no pudo hacer nada.

Aquel ser consiguió derribarlo y atraparlo para moder y desgarrar todo el cuerpo del muchacho. 

Unos minutos después se escuchó la sirena de un coche patrulla acercarse a la casa. 

Tomás salió del coche y gritó:

-Novato, ¿qué ha pasado?

En el centro del jardín había una figura que aseguraba ser Lucas.

-Solo eran unos críos- contestó.

La luz se había apagado, la puerta de la casa volvía a estar cerrada y la negra figura había desaparecido. Nadie nunca supo lo que en realidad pasó entre las paredes de aquella casa.

Cintiacarmonapavon
Miembro desde hace 3 años.
6 historias publicadas.

Para dejar un comentario, inicie sesión
elinsurgentecalleja
06 ago, 01:22 h
Misterioso y tétrico con un final aterrador.
Saludos Insurgentes
Elvira.lopu
06 ago, 19:00 h
Madre mía! Yo he pasado miedo.
Otras historias participantes en este reto
  • «Las luces de la casa llorona» , de Puri Escuredo Leer »

  • «Cuando Sara encontró el rumbo» , de Puri Escuredo Leer »

  • «Óscar y la Esencia» , de Puri Escuredo Leer »

  • «Fluorescencia programada» , de Mikel M Leer »

  • «El umbral del bosque» , de Mario Pavón Leer »

  • «Aglo, el espejo de Olga» , de Puri Escuredo Leer »

  • «La estrella polar» , de Antonio Otero Fernández Leer »

  • «Jazmine y el misterio del cuco» , de Mila Clemente Leer »

  • «Desde mi ático» , de elinsurgentecalleja Leer »

  • «Conviviendo con extraterrestres» , de Mila Clemente Leer »

  • «En medio del bosque» , de N. de la Flor Ruiz Leer »

  • «EL EMBARCADERO» , de Carmen Fernandez Mayoralas Leer »

  • «¿Cómo sería tu día antes del fin del mundo?» , de Mario Pavón Leer »

  • «Al servicio del emperador» , de Mario Pavón Leer »

  • «Tabit y Estela» , de Celia Ling García Leer »

  • «Luciérnaga cruel» , de Mayomoratallaruben Leer »

  • «La luna, el mestizo y la princesa» , de Lucia F.S. Leer »

  • «Eclipse» , de Alejandro Castillo Peña Leer »

  • «UNA BALA DE PLATA, A MEDIA NOCHE, EN WASHINGTON» , de Jaime Cenalmor Leer »

  • «La luna de la soledad» , de Agathe Leer »

Recompensa
+ XP
Acumulas XP y estás en nivel
¡Gracias!