«Les llaman bebés»

He pasado tres días en casa de los abuelos, qué bien me siento cada vez que me envían de vacaciones con ellos al campo! Me miman y desayuno tres lonchas de jamón cada mañana. Esta mañana papá ha venido a buscarme con una sonrisa en la cara, los abuelos no han parado de abrazarlo y decirle lo guapo que era el bebé, supongo que es mi nuevo apodo; mamá no ha venido, supongo que es por lo hinchada que está, no sé qué le ha ocurrido pero últimamente va descalza por casa maldiciendo el calor y a todos los zapatos con los que se tropieza mientras se toca la barriga. Una vez en el coche papá me ha obligado a oler una especie de camiseta pequeñísima con un extraño olor dulzón muy distinto al de las salchichas que él sabe que me gustan pero él no paraba de repetir "os vais a querer mucho", yo no entiendo nada, yo ya quiero a mamá... Cuando hemos entrado en casa he corrido para abrazar a mamá pero ella me ha hecho señales para que no ladrara y me ha llevado hasta una extraña cesta con una criatura todavía más extraña sin nada de pelo y con la cara muy roja. Papá me ha cogido en brazos para que la viese mejor y me ha dicho "Colin aquí tienes a tu hermanita, vais a ser los mejores amigos", creo que ella lo ha entendido porque me ha mirado con los ojos muy abiertos y de repente ha empezado a temblarle el labio y un ruido ensordecedor ha roto el momento. Mamá me ha abrazado  y me ha dicho que tenemos que acostumbrarnos el uno al otro. El ruido seguía resonando en la sala, ellos la miraban felices y yo creo que podré quererla