Escondida tras la puerta,
veo su rostro tras la mirilla,
No me atrevo a salir!
Tengo miedo! Miedo de él!
Me llama!
Tiemblo en mi refugio
escondida tras la puerta.
Tengo miedo, miedo de él!
Abrazo a mi niña,
mi único consuelo,
consuelo de una muerte segura.
Tengo miedo! !Puedo oírle!
Mis fuerzas flaquean.
Abrazo con fuerza a mi luz.
Lloro, lloro… lágrimas de angustia,
por ser yo quien está aquí.
Escondida tras la puerta
con mi niña en mis brazos,
Alegría de vivir!
Cara golpeada, amoratada,
alma dañada, interno dolor!
Quiero matar ese tormento!
Encerrada en una jaula
por un infante lacerado.
Maldito infante ladrón!
Asesino de ilusiones,
mago de sueños vejados.
Sacó su chistera una noche,
y su resplandor me cegó.
Ahora liberada de manto estoy
pero sin el corazón exento.
Liberarme de manto agreste
así como mi mente, de sombras.
Has descrito a la perfección el miedo y el terror con versos manchados de miedo.
Enhorabuena
Saludos Insurgentes