Entre pétalos de rosa
y el verdor de la ribera,
despierta, frágil y hermosa,
una nueva primavera.
Pequeños pétalos rosas
que simulan con recelo
el vuelo de mariposas
en tu piel de terciopelo.
Pequeños pétalos suaves
que resbalan por tus labios
de esa forma que tu sabes,
con ternura, sin agravios.
Pequeños pétalos tiernos
que acaricio en mi recreo,
que acaloran los inviernos
cuando yo más lo deseo.
Pequeños pétalos bellos
en tus ojos esmeralda,
que iluminan de destellos
tu semblante, cual guirnalda.
Pétalos que en mi memoria
conservo como onzas de oro
de recuerdos de una historia
más valiosa que un tesoro.
¡Viva la poesía!
Saludos Insurgentes