Hoy es la noche de los Reyes Magos, sin duda en la que hay mayor magia concentrada, gracias a los sueños, los deseos y las ilusiones que todos sentimos en un mismo momento.
Pero… ¿y si alguien utiliza toda esa magia para su propio provecho?.
LA NOCHE PARA KETKRÓKUR
Mi nombre es Ketkrókur y soy uno de los 13 Santas de Islandia. Nos dedicamos a colocar regalos en la época de Navidad, pero también colocamos castigos, que sin duda es mi parte favorita. Al igual que el hombre de rojo también entro por las chimeneas, ayudado de mi gancho, con el que pincho mi comida favorita, la carne. Te aconsejo que no te tropieces conmigo porque siempre suelo estar hambriento.
Tras estar toda la Navidad repartiendo los regalos y disfrutando al ver las caras de quienes han recibido sus merecidos castigos, he viajado a España, ya que quiero aprovechar esta noche mágica para llevarme conmigo toda la magia posible.
LA NOCHE PARA MELCHOR, GASPAR Y BALTASAR
Los Reyes de Oriente se encontraban perplejos ante lo que veían frente a sí. El cielo similar a una aurora boreal rezumaba magia, y en medio de toda esa amalgama de colores, alguien estaba absorbiendo todo aquel poder.
El miedo de los tres iba en aumento cuando comprobaban que ninguno de sus trucos era eficaz contra ese ser.
De repente miraron asombrados cómo multitud de personas estaban saliendo a la calle y se iban cogiendo de las manos. No paraban de llegar niños, jóvenes y adultos que se unían en un deseo, no perder esa magia que estaban intentado robarles.
Y así, unidos en un mismo deseo, fue como Ketkrókur fue derrotado, porque él carecía de ese poder, ser parte de los sueños, deseos e ilusiones que todos sentimos la noche de Reyes.


Saludos Insurgentes