Carlos Veiga Cribeiro
Historias de un Agujero Negro
Relatos cortos de luces y sombras
sin solapas
- Formato: 14x21cm
- Encuadernación: Tapa blanda
- Páginas: 100
- ISBN:
SOBRE EL LIBRO
LEE TAN SOLO UN RELATO, Y NO QUERRÁS DETENERTE AHÍ
Historias de un agujero negro: Relatos cortos de luces y sombras es un fascinante libro de relatos cortos que se sumerge en la riqueza de la metáfora y sigue la tradición de Esopo y Oscar Wilde. Con más de veinte cuentos. La obra abarca una amplia gama de temas, desde la presencia de una figura femenina etérea, hasta la exploración de cuestiones profundas veladas bajo la apariencia de fábulas animadas. La colección se inicia como un regalo para una musa ausente, evocando la melancolía de Mario Benedetti al esperar que sus palabras nunca hayan sido leídas.
Uno de los relatos nos introduce en la rutina de Belinda, quien encuentra consuelo en las mañanas observando su pequeño jardín. Este espacio, más que un simple patio, es un santuario lleno de césped, plantas cuidadas y un cerezo que, aunque ahora despojado de hojas y flores, simboliza la resiliencia tras las adversidades. La narrativa se enriquece con la presencia de pájaros vibrantes que pintan el paisaje con sus colores, pero entre ellos, destaca una figura gris y descolorida que se aparta del bullicio, revelando una dualidad intrigante.
A través de estas historias, el autor teje un tapiz literario que explora las complejidades de la existencia, desde la búsqueda de la belleza en medio de la monotonía, hasta la confrontación con realidades crudas como el suicidio, el alcoholismo y la guerra. Con su habilidad para fusionar la fantasía con la realidad, Historias de un agujero negro: Relatos cortos de luces y sombras invita a los lectores a sumergirse en un mundo donde las metáforas y las moralejas revelan verdades universales de una manera única y cautivadora.
Sobre el autor
Carlos Veiga Cribeiro
Carlos Veiga es un apasionado escritor cuya fascinación por la palabra escrita se remonta a su infancia. A la temprana edad de 8 años, ya demostró su creatividad al escribir un libro de 30 páginas que narraba una épica batalla entre dos pueblos de trolls. Esta chispa inicial reveló su conexión innata con la escritura, una llama que no se extinguiría. A los 10 años, inmerso en las páginas de El Señor de los Anillos, se consolidó su amor por la lectura, marcando el inicio de un viaje literario sin pausa.
El impulso de escribir resurgió durante la universidad, entre exámenes y responsabilidades. Un sueño vívido de un hombre en una azotea de una ciudad solitaria se convirtió en la semilla del cuento "La azotea". Con dedicación y paciencia, Carlos fue dando forma a esta historia, marcando su regreso al mundo de la escritura. Poco después, en medio de una clase, nació la idea de "Personitas de luz", un cuento que exploraba un pueblo donde coexistían personas de luz y de sombra, un reflejo de la dualidad humana y del amor entre una chica de luz y un chico de sombra.
La inspiración para sus relatos llega en forma de ideas y sueños, apuntados y desarrollados con esmero. Frases como "Una persona con ganchos" o dos palabras como "El espantapájaros y el cuervo", se convierten en troncos de árboles literarios, ramificados y cultivados hasta alcanzar su plenitud. Animado por una amiga, Carlos decide compartir sus historias con el mundo y se aventura a publicarlas. Espera que sus cuentos lleguen a cautivar a los lectores, alimentando así su deseo de continuar con este apasionante proyecto literario.